Los nuevos sensores de movimiento por radar de Pepperl+Fuchs permiten abrir portones y puertas automáticasde forma fiable y rentable. Basados en la potente tecnología de 24 GHz con control por microprocesador, los sensores de radar ECHO detectan personas y objetos incluso en condiciones difíciles. Existen dos versiones diferentes para diferentes aplicaciones y áreas de uso: la variante estándar ECHO-D y la variante básica ECHO-M.
El sensor de impulsos de apertura ECHO-D con antena doble ofrece todas las funciones estándar para el funcionamiento eficiente de puertas automáticas. El sensor de radar está homologado en todo el mundo para la detección de objetos en movimiento en puertas automáticas. Ya sea mediante la supresión de tráfico cruzado, la detección de dirección o el modo de cámara lenta: el ECHO-D se puede configurar de forma flexible para realizar una amplia gama de tareas de detección. Como punto destacado, el control a distancia ofrece un funcionamiento especialmente cómodo. Además, su alto nivel de inmunidad frente a interferencias hace que el sensor sea insensible a las influencias ambientales como la lluvia, las luces fluorescentes o las vibraciones. Esto garantiza un funcionamiento sin interrupciones en exterior sin usar medidas de protección adicionales.
El económico sensor de impulso de apertura ECHO-M está equipado con una antena sencilla. Este sensor es adecuado para aplicaciones básicas en zonas en las que se permiten detectores de movimiento simples en puertas giratorias y deslizantes. Desde el diseño hasta la fabricación, Pepperl+Fuchs garantiza el cumplimiento de los más altos estándares de calidad para que los dispositivos siempre detecten de forma fiable la presencia de personas y objetos.
Gracias a su resistente diseño electrónico y mecánico, los sensores de impulso de apertura ECHO impresionan por su gran durabilidad y resistencia a la manipulación. Los relés de estado sólido proporcionan una mayor frecuencia de conmutación en comparación con los relés mecánicos, lo que maximiza su vida útil. Además, los dispositivos solo pueden ser abiertos por personal cualificado, lo que los protege frente a su manipulación por personal no autorizado.
Los sensores de movimiento por radar son rápidos y fáciles de poner en marcha: Pulsadores de gran tamaño y visibilidad que permiten ajustar la sensibilidad con una sola mano. El campo de detección se puede cambiar simplemente girando la antena horizontal o verticalmente. Una marca de ángulo visible y una señal acústica proporcionan una mayor comodidad en el uso.
Con su carcasa cúbica en miniatura, los sensores ECHO se pueden integrar perfectamente en cualquier diseño de puerta. Los diferentes colores de las cubiertas permiten que los sensores se integren discretamente en su entorno. Además, los sensores de movimiento ofrecen la máxima flexibilidad durante la instalación. Además del montaje en pared y techo, también es posible instalar los sensores completamente en el techo utilizando un kit de montaje específico. En puertas de vidrio o acero en las que el montaje trasero no es opcional, se pueden utilizar dos entradas de cable laterales. De esta forma, los sensores de impulso de apertura se adaptan perfectamente a muchos entornos de instalación diferentes.