Las unidades de purga Enviro-Line son sistemas de presurización de carcasas para áreas no peligrosas y cuyo principio de funcionamiento se basa en el suministro de aire de instrumentación comprimido o gas inerte. Se encargan de regular y supervisar la presión del interior de la carcasa sellada con un valor de presión constante para evitar la acumulación de gases y polvos cáusticos y perjudiciales.
La eliminación de estos polvos y gases amplía la vida útil de los equipos eléctricos e instrumentos de elevado coste que se instalan en la unidad de purga Enviro-Line.
Las presiones más altas del interior de la carcasa eléctrica aíslan de los entornos corrosivos que permanecen en el exterior. El sistema mantiene una presión constante de agua de 0,5" dentro de la carcasa para proteger de los efectos del gas o polvo.